Crassulaceae, del Latín crassus,-a, -um, que significa "espeso, graso, denso" por las hojas que son espesas.

 

El término crasuláceo hace referencia a las hierbas y de los arbustos angiospermos dicotiledóneos, con hojas carnosas sin estípulas, flores encima y por frutos folículos dehiscentes con semillas de albumen carnoso. Estas plantas almacenan agua en sus hojas suculentas ya que su hábitat lo conforman típicamente zonas secas y calurosas, donde el agua es escasa.

 

En este jardín se tiene en cuenta la importancia de las Crasuláceas que se caracterizan por la manera tan increíble de almacenar el agua que aprovecha absorbiendo en tiempos de lluvia para resistir al clima seco el resto del año, además de sus colores que las hacen únicas. De esta familia Crassulaceae se toma a las “siempre vivas”, plantas muy vistosas, para hacer la sección de “CRASULÁCEAS” del jardín, pero cabe mencionar que también se están trasplantando algunas otras como “dedos de niño”.